"Enormes dudas" sobre el nuevo sistema de videovigilancia que regulará el aparcamiento de Tui

Preocupación en Tui. El grupo municipal del PP ha expresado recientemente en el Pleno municipal sus "enormes dudas" por la inminente implantación del sistema de control por videovigilancia en las zonas de aparcamiento regulado del centro de la ciudad miñota y temen que pueda tener más afán recaudatorio que de ordenación del aparcamiento. Este sistema, que ya se puede ver instalado en diferentes calles del centro urbano, sorprendió hace unos días a las personas usuarias de la zona azul.

Los populares tudenses denuncian la falta de una ordenanza previa que regule esta medida, "que está creando mucha desconfianza e incertidumbre entre las vecinas y vecinos", señala el portavoz del PP. Este sistema de videovigilancia se va a implantar sin tener en cuenta el asesoramiento de la Policía Local, que a día de hoy, sigue sin tener información sobre la puesta en funcionamiento de esta medida. El edil popular, Nico Montes, se muestra expectante, pues "todo indica que con la implantación de este sistema se busca controlar el tiempo de permanencia de los vehículos en la zona azul y, por lo que parece, el tiempo comenzará a contar en el momento en el que se acceda con el vehículo a esa zona y no cuando se estacione". A este nuevo sistema, que supondrá un coste de más 100.000 euros a las arcas municipales y que comenzará a funcionar de manera provisional a mediados de este mes de agosto, hay que añadirle la nueva humanización de Augusto González Besada, prevista para los próximos meses, que prácticamente eliminará las plazas de aparcamiento de toda la calle, pasando de las 46 plazas actuales, a 20, de las cuales diez serán de carga y descarga.

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Este sistema afectará a toda la actual zona actual de la ciudad tudense, además de las calles Lugo y Compostela, incorporándose en el 2025 Casal Aboy, Maristas, Martínez Padín, Colón y parte de la Avenida da Concordia mientras desde el equipo de gobierno siguen sin ofrecer soluciones al grave problema del aparcamiento que está sufriendo la ciudad después de "haber gastado más de 200.000 euros en el fracasado parking subterráneo".